A pesar de lo que muchos creen, el café no es tan dañino para una persona con diabetes sino que por el contrario, consumir café en cualquiera de sus variantes reduce el riesgo de padecer de diabetes tipo 2, gracias a varios antioxidantes que posee este grano.
Estas propiedades antioxidantes
se potencian al preparar el café con agua, por supuesto que se debe de
consumir sin azúcar y en el caso de agregarle leche esta debe de ser
descremada.
La diabetes, esta intimamente relacionada con la obesidad y el sedentarismo, la diabetes
aparece cuando hay demasiada azúcar en sangre, ya sea por consumo
excesivo o por la producción de una insulina insuficiente o de mala
calidad, provocando que estén presentes grandes valores de glucosa en la sangre.
Cuando una persona padece de diabetes,
sufre un estrés oxidativo, lo que puede provocar un mal funcionamiento
en algunos órganos del cuerpo como por ejemplo; el hígado, los riñones,
la vista, etc.
“Los antioxidantes del café pueden
modular la liberación de la glucosa almacenada en el hígado y activan
los receptores de insulina, reduciendo así el riesgo que representan
las altas concentraciones de azúcar en la sangre y
así, el consumo de café apoya en la disminución de la concentración de
azúcar en la sangre”, afirmo la doctora Ruth Pedroza Islas, de la
facultad de Ciencias de Ingeniería Química de la Universidad
Iberoamericana.
Fuente: www.ladiabetes.net