Si padeces de diabetes (tipo 1 o tipo 2), un factor fundamental
en tu tratamiento y tu control es medir el nivel de glucosa en la
sangre. La lectura de ese nivel de glucosa te informa rápidamente si tu
cuerpo está utilizando correctamente la insulina o si tienes suficiente
cantidad de ella. Como el nivel de glucosa en la sangre cambia a
menudo, debes aprender a medirlo varias veces al día. La mejor manera
de hacerlo es usando un dispositivo llamado glucómetro. Aquí te
brindamos información y consejos útiles para usarlo correctamente.
Si te han diagnosticado diabetes, debes monitorear y controlar tu
glucosa a diario. Con seguridad ya sabes que la glucosa es el
combustible que las células necesitan y a la que le dan la entrada
solamente si llega acompañada de la insulina. La cantidad de glucosa en
la sangre se expresa en miligramos por decilitro. Mira los números que
la American Diabetes Association (Asociación Americana de la Diabetes) recomienda que tengas como meta:
- 70-130 mg/dl antes de las comidas (en ayunas)
- Menos de 180 mg/dl, de 1 a 2 horas después de una comida
Para saber cuál es tu nivel de glucosa en un momento dado, necesitas
un glucómetro (un aparato especial para ese propósito). Tu médico o el
farmacéutico pueden ayudarte a elegir el glucómetro más adecuado para
ti, a que lo uses correctamente y a que lleves un registro de los
resultados.
Cualquiera que sea el modelo de glucómetro que escojas, contará con
un dispositivo de punción, una lanceta, tiras reactivas y el monitor o
pantallita en la que se verán los resultados de la prueba. Los
siguientes factores te ayudarán a decidir el que más te conviene:
- Velocidad para obtener los resultados
- Cantidad de sangre que se requiere
- Tamaño del monitor y que los números se puedan leer fácilmente
- Posibilidad de poder tomar la muestra de sangre de otras partes del cuerpo, además de los dedos (del antebrazo, por ejemplo)
- Si proporciona datos adicionales (fecha y hora del resultado)
- Costo de las tiras reactivas
- Facilidad para usar el dispositivo o de transportarlo contigo a donde vayas (su tamaño, su peso)
Los pasos a seguir para medir la glucosa
- Lávate bien las manos con agua y jabón o pasa una toallita con alcohol sobre el área del pinchazo. Deja secar el área.
- Pincha el sitio (el dedo, por ejemplo) con el dispositivo de punción para obtener una gota de sangre.
- Aprieta delicadamente el dedo o dale un masaje hasta que salga una gota (o la cantidad que requiera tu glucómetro).
- Coloca y mantén el borde de la tira reactiva con la gota de sangre y espera el resultado.
- Tu nivel de glucosa (azúcar) aparecerá en la pantallita del glucómetro.
Poco a poco te irás acostumbrando y podrás hacerlo de manera rápida y efectiva. Pero pueden presentarse algunos problemas.
Si no puedes obtener la cantidad de sangre necesaria
- Coloca las manos bajo un chorro de agua caliente y frótalas entre sí.
- Deja colgar la mano por debajo de la cintura.
- Aprieta ligeramente el área del pinchazo durante 3 segundos.
- Coloca el dedo sobre una superficie firme para evitar mover la mano mientras das el pinchazo
- Regula la profundidad de la lanceta. Auméntala en caso necesario.
- Usa una lanceta nueva cada vez que midas tu glucosa.
Para evitar que el pinchazo te duela demasiado, disminuye el nivel
de profundidad de la lanceta y da los pinchazos en los costados de los
dedos en lugar de las yemas. Intenta tomar la muestra de otras áreas
del cuerpo, como el antebrazo o el muslo.
¿Qué tan seguros son los resultados?
Cuando te hacen una prueba en un laboratorio, los resultados van a
ser precisos y exactos. Pero cuando uno mismo la mide en casa, pueden
influir ciertos factores para dar un resultado incorrecto. Para obtener
un buen resultado debes seguir cuidadosamente los pasos anteriores (o
los pasos indicados en el manual de instrucciones de tu glucómetro).
Hay otros factores que pueden darte un resultado que no es correcto:
- El glucómetro está sucio
- El glucómetro o la tira reactiva no están a temperatura ambiente
- La tira reactiva ha expirado
- Las tiras reactivas no corresponden al modelo del aparato
- El aparato no está calibrado para las tiras que estás usando
- La gota de sangre es muy pequeña
Si en lugar de la cifra en la pantalla aparece la palabra error,
revisa el manual del usuario del glucómetro y busca los códigos de
error para ver qué has hecho equivocadamente. También puedes llamar al
teléfono gratuito del fabricante para que te aclaren cualquier duda
sobre el funcionamiento.
No descanses hasta convertirte en todo un experto(a) en medir tu
glucosa en tu sangre. El proceso es sencillo y vital para mantener a
raya la diabetes y proteger tu salud. Recuerda que debes mantener un
registro con tus resultados para que tu médico pueda ver cómo
evoluciona tu tratamiento para que te ayude a hacer cambios y ajustes
si es necesario.
Fuente: www.vidaysalud.com