La cetoacidosis diabética (DKA, por sus siglas en inglés) ocurre cuando
una combinación de niveles altos de azúcar en la sangre e insulina
insuficiente en el cuerpo provoca una acumulación de ácidos que se
llaman cetonas. Las cetonas son tóxicas. Si la DKA no se trata, puede
provocar coma diabético e incluso la muerte. Mayormente, afecta a las
personas que tienen diabetes tipo 1. Sin embargo, también puede ocurrir
con otros tipos de diabetes, incluidas la diabetes tipo 2 y la diabetes
gestacional (durante el embarazo).
La DKA es una afección muy grave. Las personas que tienen diabetes
deben comunicarse con su médico o ir a un hospital de inmediato si
tienen síntomas de DKA. Los primeros síntomas en aparecer, por lo
general, son:
- Sed excesiva.
- Boca seca.
- Orinar con frecuencia.
- Nivel alto o moderado de cetona en la orina (que puede examinarse con un kit de orina para el hogar).
- Nivel alto de azúcar en la sangre.
- Vómitos (por lo general, más de una vez).
- Dolor abdominal.
- Diarrea.
- Problemas para respirar.
- Confusión o problemas para concentrarse.
- Pérdida del apetito.
- Debilidad y fatiga.
- Aliento con olor a fruta.